Calles y casas inundadas, carros atrapados, carreteras destruidas y enfermedades por doquier, son los resultados de un invierno catastrófico que tiene aproximadamente mes y medio azotando a la ciudad de Guayaquil, las lluvias acompañadas de rayos y truenos que superan los 25 milímetros de agua y 20 centímetros de altura, según los pluviómetros, ponen en alerta a instituciones nacionales.
Los sectores más afectados hasta el momento son: Monte Sinaí, Isla Trinitaria, Flor de Bastión, Los Vergeles, Duran y Milagro, donde; las aguas no descienden a pesar que hay días con lluvias leves.
En esta última semana por los efectos de las inundaciones y el anuncio de lluvias continuas por parte del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología, la Secretaria Nacional de Gestión de Riesgo (SNGR) ha declarado alerta amarilla en 12 provincias del país, dentro de ellas Guayaquil.
Representantes del INAMHI aseguran que en lo que va del mes de febrero se han superado parámetros históricos, aproximadamente un 25% más, pues ha llovido la cantidad que se esperaba para un mes en toda la región litoral y que el puerto principal está siendo afectado por los sistemas meteorológicos que suelen presentarse en estos meses del año.
Esto sin embargo, no anuncia la presencia del fenómeno del niño según informa el Instituto Nacional Oceanográfico, lo que se destaca es un enfriamiento del mar en condiciones normales entre 26 o 27 grados, la misma que es una característica principal del fenómeno de la niña pero no representa una amenaza.
El Centro Internacional para la Investigación del Fenómenos de El niño, CIIFEN; en uno de sus últimos informes que abarca el período de Febrero y Marzo del presente, reconfirma la situación que vive actualmente el país, especialmente en la costa, sierra y sur de Ecuador.
Respuestas inmediatas!!
Directivos de Gestión de Riesgo ponen a trabajar sus maquinarias en sectores específicos, pero la desesperación por mejorar la situación crea problemas entre los moradores que van desde agresiones verbales hasta físicas. La idea es la creación de zanjas estratégicas para filtrar las aguas lluvias y que estas desfoguen en un sitio determinado, las autoridades enfatizan que este trabajo va más allá de la necesidad.
El aporte de miembros del Benemérito Cuerpo de Bomberos de Guayaquil (BCBG) ha sido clave para el rescate de personas en accidentes, ahogados y demás desgracias que traen consigo las lluvias, así mismo, la Vicepresidencia de la Republica a través de la misión Manuela Espejo, se pronuncia con brigadas de ayuda en los sectores donde existen casas caídas y pérdidas materiales. La labor de la Policía Nacional también incrementa constantemente.
Uno de los informes generalizados del INAMHI pronostica que, la precipitaciones climatológicas en horarios matutinos serán nubladas con claros ocasionales y lluvias, mientras que en el vespertino existirán lluvias sectorizadas y en el horario nocturno lluvias en toda la urbe.
Se espera que para el mes de abril el temporal disminuya y que para la primera semana de mayo la catástrofe haya terminado.
