En las calles de Guayaquil ya se han encontrado muchos casos similares, ciudadanos abandonados inconscientes y desvalijados son resultados de una dosis de escopolamina, el arma de las famosas bandas de los dulces sueños, mujeres que seducen a incautos y al primer descuido les administran en la bebida esta peligrosa sustancia. Los síntomas son amnesia temporal, insuficiencia respiratoria y convulsiones. Una sobredosis puede llevar incluso a la muerte.
Felizmente muchos de los afectados no han llegado hasta este trágico final pero si aprendieron de forma amarga, les robaron todo lo que tenían.
Este joven a quien identificaremos como Mario fue una de las víctimas.
Según estadísticas de la policía judicial de Guayas en lo que va del 2011 recibió 95 casos denunciados, de los cuales 80 son por robo, el resto por violaciones y otros delitos, solo en Guayaquil, la mayoría de casos corresponden a hombres que fueron interceptados a la salidas de centros nocturnos. Las autoridades mantienen un trabajo policial constante.
La banda de las dulce sueños escogen a sus víctimas el modus operandi es similar, con sus atributos seducen a los extraños sin prevención y al mínimo descuido usan la citada escopolamina u otra sustancia después aprovechan la somnolencia para quitarle sus pertenencias.
Lo extraño que durante los operativos policiales se han decomisado drogas como la marihuana, cocaína y otras pero menos escopolamina, que nos indica esto?
El jefe del departamento legal de la policía destaca las propiedades de un medicamento que tiene efectos parecidos al de la escopolamina, así lo determino en base a varias autopsias.
Es decir, que la benzodiazepina está ganando terreno muy aparte de la escopolamina, es un fármaco que se puede comprar sin receta médica, una falta de control que colabora en estos delitos.